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Los Mariachi

Pueden ser dos, cuatro o hasta 30 hombres. No importa el número. Lo que importa es la música y las voces que, imponentes, se quedan grabadas en la memoria. La trompeta y los violines marcarán la entrada a una serenata que con letras de amor o de patria, buscará elevar el espíritu de quien la escucha. Latinoamericanos, europeos, Norteamericanos, todos hemos escuchado alguna vez esa música pero quienes hayan visto a un mariachi, ataviado en su traje típico de charro, habrán visto a un símbolo de México.

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La historia del mariachi y sus raíces están perdidas en el tiempo. Unos afirman que la palabra "mariachi" se empezó a utilizar cuando pequeños conjuntos musicales integrados por una guitarra, un violín y un arpa animaban fiestas familiares como bautizos y bodas. De esta forma, por estar tan ligados estos grupos a las familias o a los matrimonios, se les denominó con la palabra "mariage",del francés, que significa matrimonio. Más tarde, se deformó este nombre hasta convertirse en "mariachi" para referirse a los músicos que amenizaban fiestas familiares.

Esta teoría ha sido muchas veces rebatida por investigadores quienes alegan que el origen de la palabra "mariachi" es completamente indígena. Una versión que tomó fuerza en 1981 cuando se encontraron en los archivos de una iglesia una carta escrita por el Padre Cosme Santa Ana en 1848 donde se dirigía al arzobispo de su Diócesis y en ella denunciaba los escándalos ocasionados en su pueblo por los "mariachis". La fecha de esta carta es anterior a la invasión francesa, lo cual podría desmentir la versión anterior sobre el origen francés de la palabra.

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Si bien el mariachi se asocia con Jalisco, la tradición se extiende a los estados vecinos de Michoacán, Colima, Nayarit y Zacatecas. Entre los estilos de mariachis más famosos, se incluyen los de Cocula, Tecatitlán y la Sierra del Tigre. La primera referencia que se tiene de un grupo de mariachi en las grandes ciudades de México data de 1905, con el cuarteto dirigido por Justo Villa, quien grabó los primeros discos de música de mariachi en 1906.

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A principios de este siglo, era inusual ver conjuntos con instrumentos de viento. La flauta, el clarinete, el saxofón soprano, el trombón, el cornetín y la trompeta no se veían con frecuencia en los grupos tradicionalmente integrados por instrumentos de cuerda. Fue recién en los años 30 que algunos mariachis de la Ciudad de México incorporaron la trompeta que fue cobrando fuerza hasta convertirse en un instrumento imprescindible. El famoso Pedro Infante grabó en 1949 las primeras canciones con un mariachi con dos trompetas, una innovación que tuvo mucho éxito.

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Desde entonces, el mariachi no sólo amplió su repertorio de instrumentos sino que también transformó su indumentaria que de un pantalón y camisa de manta pasó al traje de charro con sombrero bordado, traje de botones dorados, carrillera de plata y corbata de seda.

El aspecto cambió pero el sentimiento siguió intacto. Como intacta la pasión con la que un mariachi canta y enamora o entona versos como el "México lindo y querido/ si muero lejos de ti / que digan que estoy dormido / y que me traigan aquí", uno de sus himnos.

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Listos para el Grito

¡Y los mariachis tocaron!
Por Mundoregio.com

Si la cocina mexicana toca los sentidos al paladearse, la música de mariachi los despierta, al ritmo de sones que cantan lo mismo al amor que se fue que celebran esa esencia de ser mexicano.

Orgullosamente tradición mexicana, el origen de la palabra como tal se adjudica una corrupción de la palabra francesa “marriage” (matrimonio), término con que los franceses se referían a la música que se tocaba en esas festividades en la época de la intervención francesas. Pero otra teoría afirma que el término deriva de un canto indígena a la Virgen María, en el que se mezclan náhuatl, español y latín: “Maria ce son” (Te amo María) pronunciándose “Maria ce” como maria she o maria shi lo que daría origen al vocablo “mariachi”.

Es en la región de Los Altos de Jalisco donde se adjudica el nacimiento de la tradición, pero pronto se extiende a estados vecinos como Colima, Nayarit, Michoacán y Zacatecas. Siendo sus primeros orígenes bandas que amenizaban las bodas y fiestas del lugar; hasta 1900 permanecen en el área rural siendo menospreciados por la aristocracia, pero en 1905 son llevados a la capital un grupo de mariachi a cantar en las celebraciones del cumpleaños del presidente Porfirio Díaz.

En un principio, los instrumentos del mariachi se caracterizan por ser sólo de cuerdas: violines, vihuelas y guitarrones. Es hasta 1930 que se integra la trompeta, hoy característica en la música del mariachi.

Algo semejante pasó con la vestidura, ya que en un principio eran sencillos trajes de algodón y manta, sufriendo un proceso de transformación y sofisticación al aparecer al lado de las figuras de la canción como Jorge Negrete, Pedro Infante o Lucha Reyes. Generalmente se usaban dos tipos de colores en sus trajes, negro y blanco. Los trajes mostraban abotonaduras a los lados del pantalón y un saco corto también con bordados, a la usanza de los antiguos hacendados. El sombrero también es de gala, y el bordado o la ausencia de ellos, varía de acuerdo a la región. Algunas veces el uso del sombrero es reservado sólo para el cantante principal o tenor.

Es característico del mariachi el son jalisciense, aunque ya ha derivado en el llamado bolero ranchero o ha integrado otros géneros musicales como el huapango.

José Alfredo Jiménez es quizás el compositor más importante de este género. Muchas de sus composiciones son íconos de la canción ranchera, siendo las más conocidas: El rey, Camino de Guanajuato, Serenata Huasteca, Cielo Rojo, Amanecí en tus brazos, Paloma querida, Muy despacito, El jinete, Ella, Te solté la rienda, Qué bonito amor, Si nos dejan, No me amenaces, Cuatro Copas, Un mundo raro, En el último trago, El caballo blanco, entre otras. Así mismo, Pedro Infante y Jorge Negrete son a su vez los máximos exponentes de la canción vernácula. Con una gran trayectoria en cine y radio, lograron traspasar las fronteras y exportar la música de mariachi fuera del país.

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